El partidazo de Messi no bastó para salvar el liderato

LA LIGA SE COMPLICA. El Barça dejó escapar en Almería la ventaja que tenía y el Madrid le atrapa en el liderato. La Liga se pone al rojo vivo. Está claro que los blancos aprietan con fuerza mientras que los de Guardiola no están en su mejor momento. La lucha por el título será dura y complicada. Falta un mes para el derby del Bernabéu y a partir de ahora cada partido será a cara de perro, a vida o muerte. Ayer los barcelonistas sufrieron mucho y menos mal que Messi con un partidazo salvó un punto después de ir siempre a remolque en el marcador. Las expulsiones de Guardiola y Ibrahimovic –totalmente injusta- no ayudaron, pero en honor a la verdad hay que decir que al Barça en los últimos partidos le cuesta más de la cuenta ganar y su dominio del balón no tiene reflejo en el marcador. Por el contrario el Madrid de Pellegrini con Ronaldo de bandera tiene una gran pegada y la prueba es que anoche remontaron un 0-2 adverso con la épica madridista, marcando el gol del triunfo en el último minuto.

SOLO SE SALVO MESSI. El Barça actual está por debajo del que la pasada temporada dominaba la Liga con claridad. En Almería sólo Messi estuvo a la altura de un equipo campeón, dando la cara, echándose la responsabilidad del equipo a la espalda y consiguiendo dos goles que evitaron la derrota. Lo cierto es que al Barça todo se le puso en contra, desde un gol inicial a la salida de un córner, pasando por la expulsión de Guardiola, la de Ibra y el autogol de Puyol. Es increíble que dominando el balón el 70% del tiempo aún con un jugador menos, no materialicen más ocasiones de gol. Su juego fue lento y previsible, con mucho sacrificio pero poco rendimiento. Es como si el equipo hubiese perdido la inspiración, la magia, lucharon contra la adversidad pero solo salvaron un punto.

EL MADRID ASALTA EL LIDERATO. El empate del Barça habría sido mucho mejor resultado si el Madrid no hubiese ganado en el último minuto. El Sevilla estuvo cerca de dar la sorpresa en el Bernabéu hasta el punto de que se situó 0-2 en el marcador. Pero este año los blancos tienen más gol que nadie y esto es jugar con ventaja. Metieron tres y estrellaron otros tres balones en los postes. El Sevilla fue de más a menos de forma evidente y al final pagó cara su estrategia conservadora. El Bernabéu es un fortín y allí Ronaldo y compañía se sienten capaces de todo. Una cosa comienza a estar clara, es más que probable que si el Barça quiere ganar esta Liga tenga que ganarla en el Bernabéu. Lo dicho, este título será disputadísimo hasta el final.